Podríamos titular esta crónica como “Autopista hacia el cielo” tal y como me dijo Alex en el recorrido de hoy por dos motivos: el primero por el bello paisaje que nos ofrece el tramo recién asfaltado del cruce de Lucillo a Filiel con un impresionante Teleno nevado al fondo y segundo porque ha habido mas de un recuerdo interior hoy a la figura de el supremo señor y nuestras fuerzas en el recorrido ventoso y exigente que se nos planteaba.
A las 10 el cielo aparece despejado y temperatura media de 10 grados, pero el viento es el temor de todos en el día de hoy. También éramos diez cicloturistas: Avelino, Manolo, Benito, Alberto, Jandro, Alex, Carlos, Juan, Omar y yo mismo. Todavía quedan restos del invierno en nosotros con toses, mocos a mansalva y otros fluidos respiratorios esputatorios.
El recorrido se adentra en tierras maragatas en toda su extensión, tiramos dirección Murias, Castrillo de los Polvazares, aparecen las primeras rampas, después Pedredo, y llegamos a Santa Colomba de Somoza.
Recorrido éste que aparece en casi todas las guías turísticas y que para los que somos de aquí es casi como de andar por casa. Pueblos de suelos adoquinados, fachadas de piedra, balcones maragatos, paisanos bien abrigados, olor a cocido a partir de las 12 y más cosas que no caben en esta pequeña crónica y que están en la imaginación de todos los que leen ahora este texto.
El tramo libre comienza aquí en Santa Colomba y termina en el alto de Campo Muga.
Ha sido determinante en la salida de hoy, dado que solo habían transcurrido unos 20 kilómetros desde casa y supone un vaciado energético para algunos que determinaría el resto del recorrido.
En principio no tiene mucho que contar dado que Carlos marcó de inicio a final el ritmo en todo momento y se llevó el ‘pollo’ con total autoridad y sin discusión. Sólo Alex y yo le seguimos el paso en la subida, pero en los últimos tramos impone ese pedalear pistonero que tiene encima de la bici y se lo lleva con facilidad. Alex le siguió de muy cerca pero otra vez será compañero. Por mi parte me entregué hasta mi máximo esfuerzo y eso me costó un cierto malestar en el resto del recorrido que no conseguí recuperar hasta bien llegados a Astorga.
Por cierto vimos un corzo en plena carretera en esta subida y me recuerda algún mal momento personal a pesar de la belleza y elegancia de estos animales.
El pelotón se reagrupa en el alto y se dirige hacia Lucillo para bajar después a Filiel, bajada ésta espectacular con el recién asfaltado, Avelino toma fotos aquí.
Después vamos a Boisán pero ya la carretera está parcheada por todas partes y hay que andar bien atentos. El viento sopla a favor y el pelotón se empieza a acelerar por delante. Llegamos a Quintanilla de Somoza y el ritmo baja para poder comer y beber. Llegamos hasta Luyego, antiguo corazón de la Maragatería con sus dos maragatitos en la plaza mayor.
Después bajamos hasta Priaranza de la Valduerna, el ritmo va in crescendo por delante y el pelotón hay momentos que se enfila, los de atrás a momentos vamos asfixiados y al pasar por un cementerio leemos la siguiente inscripción a modo de apología de nuestro pequeño via crucis: “Señor no nos abandones, tu eres nuestra última esperanza”, eso lo resume todo.
La carretera sigue hasta Tabuyo, es zona de bosques y cotos bien guardados pues es fuente y sustento de estas gentes.
Después todo recto hasta Destriana.
Seguimos bajando y pasamos por Robledo poco después el pelotón se corta y los de delante no se percatan, curioso verbo.
Me adelanto con celeridad y les sigo, llegamos a Robledino y les encomio a decelerar para reagruparnos todos. Poco después giramos a izquierdas y vamos a Tejados pero el aire da de cara. Intentamos mantener el grupo unido. Después vamos hacia Bustos y por fin la Nacional VI, alma mater de mis entrenos. No sé de donde me salen tantos latinismos.
Los cuerpos ya no están para mas trotes y nos encaminamos para casita-Astorga, no obstante algunos se descuelgan demolidos por el esfuerzo ya en los últimos repechos.
Llegamos contentos aunque castigados físicamente.
Un grupo de valientes entre los que me incluyo se deciden a hacer mas kilómetros por la Cepeda para redondear la centena llegando hasta Otero y bajando por un cruce hasta Fontoria. Y así lo cumplimos.
Datos: 100 Km 27,9k/h
Esto es todo amigos. Un saludo para todos.
Jose Bike Astorga