A pesar de la mañana de perros que hacía, con un viento que invitaba más a quedarse en casa que a salir un rato con la bici, el Club cumplió con su cita dominical y al final fuimos siete los locos que nos animamos a desafiar al tiempo: Miner, Alberto, Alex, Salva, Jandro, Alfonso y Jose. Tal y como marcaba el libro de ruta, cogimos la carretera de La Cepeda aunque una vez que llegamos a Carneros hicimos una pequeña modificación sobre la ruta prevista con el fin de intentar “engañar al tiempo” tal y como dijo alguno. Así que en lugar de seguir rectos hasta Quintana del Castillo, giramos en carnero en dirección a Vega de Magaz, pasando por Villabispo, Otero y Magaz de Cepeda. A pesar de todo el viento nos daba en contra con bastante fuerza y alguno lo pasamos mal. Al llegar a Porqueros comienzan las hostilidades. Salva y Alfonso empiezan a marcar un ritmo fuerte en la subida y se llevan con ellos a Jose y Alex, mientras que Miner, Jandro y Alberto prefieren subir a un ritmo más tranquilo. Al final arriba llegan Salva y Alfonso seguidos de Jose y Alex. A continuación Miner, Jandro y Alberto. Desde ahí hasta Villameca, ayudados por un viento que ya no daba tan de cara, volamos todo el grupo comandados por un Alberto que tenía un día inspiradísimo y llevaba al grupo en fila de a uno.
Desde Villameca, subimos por la carretera vieja que da al pantano y una vez arriba se forma un grupo con Salva, Alberto, Jose y Alex. Mientras que por detrás, Miner, Alfonso y Jandro se entretienen viendo el nivel tan bajo del pantano y dan opción a que el cuarteto de cabeza vaya cogiendo una diferencia considerable. Así que no les quedó más remedio que darse un calentón para intentar enlazar con ellos, algo que no conseguirían hasta la salida de Sueros de Cepeda. Gracias a los relevos de Miner y Alfonso, ya que Jandro no iba para muchas florituras y bastante tenía con no descolgarse del trío y aguantar el arreón.
Una vez que enlazan y se reagrupan los siete, volvió momentáneamente la tranquilidad, hasta que pasado Quintana de Fon, Miner lanza un duro ataque al que responden Alberto, Alfonso, Alex y Jose. Los cinco se van a un ritmo fuerte que hace que Alex se descuelgue antes de llegar a Carneros, donde se pone fin a la batalla y el grupo entra unido en Astorga, después de 56 kilómetros con un viento molesto que no entró a favor en ningún momento.
P.D. - Cronica narrada por Jandro